Ilustración de Rafel Añez |
MICK JAGGER
El eterno desenfreno
El vocalista de The Rolling Stones se convierte, hoy, en un rockero septuagenario. Polémico, rebelde antibeatle, eterno, el inglés está vigente, bailando y gritando como si no fuera un anciano en la gira del 50° aniversario de su legendaria banda, dejando claro que sigue siendo el bueno, el malo y el feo del rock n’ roll.
Por Nelson Luis Paz
26 de julio de 2013
“Por favor, permíteme que me presente, soy un hombre rico y con clase”, así se introduce Mick Jagger, el eterno y controversial líder de la banda británica The Rolling Stones, quien celebra, hoy, sus 70° aniversario, convertido en el legendario abuelo del rock and roll.
Como esa frase traducida al español del primer verso de su polémica canción Sympathy for the devil, del álbum Beggars Banquet, de 1968, y en el que personifica la encarnación de satanás, el vocalista inglés sigue activo y con una manera tan singular que pareciera que tuviera un pacto con el diablo.
Inigualable en una tarima, con una electrizante y singular forma de moverse sobre el escenario, a sus 70 años nadie en el rock se mueve como Jagger. A su edad sigue de gira por todo el mundo con su par, el guitarrista Keith Richards. Presentamos a uno de los líderes de la invasión británica en los 60, como el bueno, el malo y el feo del rock n’ roll, recordando la película de Sergio Leone, que inmortalizó a Clint Eastwood.
El bueno:
Vocalista, compositor, actor, productor, Michael Phillip Jagger siempre ha sido un artista integral, que tuvo una niñez como cualquier otro inglés en la década de los 40. El primer hijo de un profesor y una ama de casa, nació en 1943 en Dartford, Inglaterra. Su habilidad en los estudios y su popularidad entre sus amigos no impidió que su amor por el rhythm & blues americano soñando con formar una banda con su amigo de toda la vida Keith Richards y con su compañero, el guitarrista Brian Jones.
Primero, Jagger debió ingresar, en 1960, a la escuela de economía de Londres, la cual dejaría en 1963. Para el inglés, sus raíces, la educación y el apoyo familiar fue lo importante para dar ese paso y poder salir “al margen” de las locuras de esa época. “Cuando se es joven y se tiene una vida familiar muy cercana, le ayuda a estar centrado para más adelante. Si usted no tiene una educación muy estable, creo que puede ser difícil”, recordó el excéntrico bailarín en una entrevista sobre su vida publicadapor el diario inglés The Telegraph.
Un encuentro en una estación de tren en Londres marcó el destino del vocalista, quien se encontró con el guitarrista Richards y allí planearon la fundación de una banda que posteriormente se convertiría en The Rolling Stones, la mejor banda de rock de la actualidad.
Su sencillo It’s all over now de 1964, encendería la llama de éxitos de la banda que junto a The Beatles y The Who se convirtieron en los íconos de varias generaciones. Después llegarían “Satisfaction” y “Paint it black”, con lo que lograrían la internacionalización.
Para muchos es un misterio saber el porqué Jagger ha permanecido por años con su banda. En sus inicios, ni él mismo esperaba pasar tanto tiempo con la agrupación que alcanzó su 50° calendario este año. “No lo sé. Nunca pensé que lo estaría haciendo durante más de dos años”, respondió Mick en 1965, durante una entrevista con el reconocido periodista inglés Michael Parkinson.
El malo:
The Rolling Stones surgieron en la época más fértil del rock inglés, y en ese tiempo se convirtieron en el “alter ego” de The Beatles, al conformar una banda que se ganó la fama de que ser mucho más “ rudos, malos y más sexys”, que los cuatro de Liverpool.
Por más malos que sean y luchando con todas las drogas existentes desde su fundación, los Rolling Stones se mantuvieron unidos. Tan unidos que este año alcanzaron su 23ª gira mundial.
Sin embargo, los vicios golpearon a los londinenses y en 1969 fueron azotados por una mala racha que acabó con uno de sus fundadores. En junio de ese año, Brian Jones dejó el grupo tras varios arrestos que le impidieron salir de gira a los Estados Unidos. Su sustituto fue el guitarrista Mick Taylor, que con 20 años ya pertenecía a unas de las mejores agrupaciones del momento.
Poco menos de un mes después de su deserción, Jones fue encontrado ahogado en su piscina. El informe de la policía señaló que el exguitarrista se encontraba bajo la influencia de varias drogas y del alcohol, por lo que se le dictaminó como “muerte accidental”. Ese fallecimiento prematuro desencadenó uno de los conciertos más importantes de los “Stones”, quienes se presentaron en Hyde Park, el 5 de julio de 1969, dos días después de la muerte de Jones.
Antes de que comenzara el concierto, Jagger, amante de la poesía y la filosofía, leyó un fragmento de “Adonais”, escrito por Percy Shelley, quien se lo dedicó a un gran amigo fallecido. Luego liberó cientos de mariposas y junto con su grupo interpretó “I’m yours and I’m hers”, una de las favoritas de Jones.
Fueron años agridulces para los británicos. Mick recuerda esa época como la más difícil y la más prolífera a la hora de componer los mejores éxitos de los “Stones”. “Realmente era sexo, drogas y rock and roll. Notablemente nuestra obra maestra ‘Exile on main street’ surgió durante esa mutilación. Éramos jóvenes, guapos y estúpidos”, apuntó Jagger. “Ahora solo somos estúpidos”, subrayó a The Telegraph.
A David Letterman también le admitió su adicción a las mujeres y sus relaciones tormentosas. “Se empieza a tocar rock n’ roll, así que puedes tener relaciones sexuales y consumir drogas, pero terminan haciendo las drogas lo que aún puede tocar rock n’ roll y tener sexo”. dijo Mick, quien tiene siete hijos con cuatro mujeres distintas. En años recientes han surgido rumores que mantuvo una relación homosexual con el astro del glam rock, David Bowie.
El feo:
La imagen que desde siempre ofreció The Rolling Stones fue del tipo chico malo y rudo. Mientras en la década de los 60 todos estaban detrás del estilo pulcro y alineado de The Beatles, Jagger y sus compañeros se mostraban sucios y rebeldes. Para 1969, el cabello largo era lo más dócil de un look que incluía maquillaje, aretes, ropa con encajes y pedrería, pantalones vaqueros y camisetas tan ajustadas que parecían pintadas.
Su estilo no pasó desapercibido en la cultura inglés, donde los padres obligaban a sus hijas a quedarse en sus casas y no asistir a los conciertos de los “Stones”. “A los padres no les agradan los Rolling Stones no quieren que sus hijos lleguen a ser como ellos; no quieren que sus hijas se casen con ellos”, publicaban los periódicos en esos años.
Pero eso no evitó que se convirtiera en un ícono de la moda, un codiciado soltero y mujeriego empedernido.
“La imagen de Mick Jagger fue vista como un ‘sex-symbol’ ya que tenía cierto erotismo, no tanto como Bowie, pero que le permitió ser aceptado por cualquier tipo de público, como mujeres y hombres”, refirió Javier González, vocalista del grupo marabino Kió.
Jagger tuvo tantas mujeres como éxitos con los “Stones” y todavía a sus 70 años desata pasiones entre las jóvenes con sus movimientos de cadera y su estilo a la hora de cantar. “Su sensualidad en sus presentaciones, en la que mostraba los labios gruesos, sacaba su lengua y su ropa pegada, que mantiene en la actualidad, atrajo la atención de muchas mujeres y de los medios de comunicación”, apuntó González.
“Dale a Mick Jagger un escenario del tamaño de una mesa y lo hará mejor que nadie, excepto tal vez James Brown”, escribió Richards en su biografía. “Twist, giros, unas maracas... Solía dar vueltas alrededor nuestro porque no tenía más espacio. No podías mover la guitarra. Me asombra que pudiera hacer tanto en tan poco espacio”, agregó.
Amado u odiado, en la actualidad Jagger sigue siendo como el final de su canción de 1968, pegajosa por su bajo y el uso de congas como acompañante en la percusión. “Si me conoces, ten algo de cortesía, ten algo de compasión, y algo de buen gusto. Usa toda tu bien aprendida educación o destruiré tu alma”.
PANORAMA
Por Nelson Luis Paz
26 de julio de 2013
“Por favor, permíteme que me presente, soy un hombre rico y con clase”, así se introduce Mick Jagger, el eterno y controversial líder de la banda británica The Rolling Stones, quien celebra, hoy, sus 70° aniversario, convertido en el legendario abuelo del rock and roll.
Como esa frase traducida al español del primer verso de su polémica canción Sympathy for the devil, del álbum Beggars Banquet, de 1968, y en el que personifica la encarnación de satanás, el vocalista inglés sigue activo y con una manera tan singular que pareciera que tuviera un pacto con el diablo.
Inigualable en una tarima, con una electrizante y singular forma de moverse sobre el escenario, a sus 70 años nadie en el rock se mueve como Jagger. A su edad sigue de gira por todo el mundo con su par, el guitarrista Keith Richards. Presentamos a uno de los líderes de la invasión británica en los 60, como el bueno, el malo y el feo del rock n’ roll, recordando la película de Sergio Leone, que inmortalizó a Clint Eastwood.
El bueno:
Vocalista, compositor, actor, productor, Michael Phillip Jagger siempre ha sido un artista integral, que tuvo una niñez como cualquier otro inglés en la década de los 40. El primer hijo de un profesor y una ama de casa, nació en 1943 en Dartford, Inglaterra. Su habilidad en los estudios y su popularidad entre sus amigos no impidió que su amor por el rhythm & blues americano soñando con formar una banda con su amigo de toda la vida Keith Richards y con su compañero, el guitarrista Brian Jones.
Primero, Jagger debió ingresar, en 1960, a la escuela de economía de Londres, la cual dejaría en 1963. Para el inglés, sus raíces, la educación y el apoyo familiar fue lo importante para dar ese paso y poder salir “al margen” de las locuras de esa época. “Cuando se es joven y se tiene una vida familiar muy cercana, le ayuda a estar centrado para más adelante. Si usted no tiene una educación muy estable, creo que puede ser difícil”, recordó el excéntrico bailarín en una entrevista sobre su vida publicadapor el diario inglés The Telegraph.
Un encuentro en una estación de tren en Londres marcó el destino del vocalista, quien se encontró con el guitarrista Richards y allí planearon la fundación de una banda que posteriormente se convertiría en The Rolling Stones, la mejor banda de rock de la actualidad.
Su sencillo It’s all over now de 1964, encendería la llama de éxitos de la banda que junto a The Beatles y The Who se convirtieron en los íconos de varias generaciones. Después llegarían “Satisfaction” y “Paint it black”, con lo que lograrían la internacionalización.
Para muchos es un misterio saber el porqué Jagger ha permanecido por años con su banda. En sus inicios, ni él mismo esperaba pasar tanto tiempo con la agrupación que alcanzó su 50° calendario este año. “No lo sé. Nunca pensé que lo estaría haciendo durante más de dos años”, respondió Mick en 1965, durante una entrevista con el reconocido periodista inglés Michael Parkinson.
El malo:
The Rolling Stones surgieron en la época más fértil del rock inglés, y en ese tiempo se convirtieron en el “alter ego” de The Beatles, al conformar una banda que se ganó la fama de que ser mucho más “ rudos, malos y más sexys”, que los cuatro de Liverpool.
Por más malos que sean y luchando con todas las drogas existentes desde su fundación, los Rolling Stones se mantuvieron unidos. Tan unidos que este año alcanzaron su 23ª gira mundial.
Sin embargo, los vicios golpearon a los londinenses y en 1969 fueron azotados por una mala racha que acabó con uno de sus fundadores. En junio de ese año, Brian Jones dejó el grupo tras varios arrestos que le impidieron salir de gira a los Estados Unidos. Su sustituto fue el guitarrista Mick Taylor, que con 20 años ya pertenecía a unas de las mejores agrupaciones del momento.
Poco menos de un mes después de su deserción, Jones fue encontrado ahogado en su piscina. El informe de la policía señaló que el exguitarrista se encontraba bajo la influencia de varias drogas y del alcohol, por lo que se le dictaminó como “muerte accidental”. Ese fallecimiento prematuro desencadenó uno de los conciertos más importantes de los “Stones”, quienes se presentaron en Hyde Park, el 5 de julio de 1969, dos días después de la muerte de Jones.
Antes de que comenzara el concierto, Jagger, amante de la poesía y la filosofía, leyó un fragmento de “Adonais”, escrito por Percy Shelley, quien se lo dedicó a un gran amigo fallecido. Luego liberó cientos de mariposas y junto con su grupo interpretó “I’m yours and I’m hers”, una de las favoritas de Jones.
Fueron años agridulces para los británicos. Mick recuerda esa época como la más difícil y la más prolífera a la hora de componer los mejores éxitos de los “Stones”. “Realmente era sexo, drogas y rock and roll. Notablemente nuestra obra maestra ‘Exile on main street’ surgió durante esa mutilación. Éramos jóvenes, guapos y estúpidos”, apuntó Jagger. “Ahora solo somos estúpidos”, subrayó a The Telegraph.
A David Letterman también le admitió su adicción a las mujeres y sus relaciones tormentosas. “Se empieza a tocar rock n’ roll, así que puedes tener relaciones sexuales y consumir drogas, pero terminan haciendo las drogas lo que aún puede tocar rock n’ roll y tener sexo”. dijo Mick, quien tiene siete hijos con cuatro mujeres distintas. En años recientes han surgido rumores que mantuvo una relación homosexual con el astro del glam rock, David Bowie.
El feo:
La imagen que desde siempre ofreció The Rolling Stones fue del tipo chico malo y rudo. Mientras en la década de los 60 todos estaban detrás del estilo pulcro y alineado de The Beatles, Jagger y sus compañeros se mostraban sucios y rebeldes. Para 1969, el cabello largo era lo más dócil de un look que incluía maquillaje, aretes, ropa con encajes y pedrería, pantalones vaqueros y camisetas tan ajustadas que parecían pintadas.
Su estilo no pasó desapercibido en la cultura inglés, donde los padres obligaban a sus hijas a quedarse en sus casas y no asistir a los conciertos de los “Stones”. “A los padres no les agradan los Rolling Stones no quieren que sus hijos lleguen a ser como ellos; no quieren que sus hijas se casen con ellos”, publicaban los periódicos en esos años.
Pero eso no evitó que se convirtiera en un ícono de la moda, un codiciado soltero y mujeriego empedernido.
“La imagen de Mick Jagger fue vista como un ‘sex-symbol’ ya que tenía cierto erotismo, no tanto como Bowie, pero que le permitió ser aceptado por cualquier tipo de público, como mujeres y hombres”, refirió Javier González, vocalista del grupo marabino Kió.
Jagger tuvo tantas mujeres como éxitos con los “Stones” y todavía a sus 70 años desata pasiones entre las jóvenes con sus movimientos de cadera y su estilo a la hora de cantar. “Su sensualidad en sus presentaciones, en la que mostraba los labios gruesos, sacaba su lengua y su ropa pegada, que mantiene en la actualidad, atrajo la atención de muchas mujeres y de los medios de comunicación”, apuntó González.
“Dale a Mick Jagger un escenario del tamaño de una mesa y lo hará mejor que nadie, excepto tal vez James Brown”, escribió Richards en su biografía. “Twist, giros, unas maracas... Solía dar vueltas alrededor nuestro porque no tenía más espacio. No podías mover la guitarra. Me asombra que pudiera hacer tanto en tan poco espacio”, agregó.
Amado u odiado, en la actualidad Jagger sigue siendo como el final de su canción de 1968, pegajosa por su bajo y el uso de congas como acompañante en la percusión. “Si me conoces, ten algo de cortesía, ten algo de compasión, y algo de buen gusto. Usa toda tu bien aprendida educación o destruiré tu alma”.
PANORAMA
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